Los trenes que nos alimentan VII: Victoria [2007] – Logística Carioca

Dedicado especialmente a todos los aficionados que comparten la misma pasión que yo, la azulgrana.

¿Vieron que los trenes siempre dan de que hablar, y que si no fuera por eso, nosotras no tendríamos letra? Para los que pensaban que si nos habíamos olvidado de los monos cariocas o que si ellos nos habían dado una anestesia, no, nada de eso. Es que a veces hay que ser un poco paciente y esperar, porque a la larga, algún tema va a dar de que hablar, y con tuti. Claro, yo con mis hermanas siempre estamos en el mismo sitio, es decir, bien dispuestas a seguirles serruchando el piso.

Yo pregunto: ¿qué le habrá sucedido a los monos que lanzaron un comunicado de prensa urgente? Los otros días me corrí por aquellos lares, los del FCNEA, y me llevo la sorpresa de que la cosa viene algo caldeada, claro para los que creían que lo de viajar mal es solo mal endémico de los trenes de pasajeros, no, acá las cosas también funcan como el culo. Parece que por el Litoral los trenes de carga no andan satisfaciendo las demandas de transporte de parte de las empresas y, como nunca falta aquel bocón que vaya y llame a la prensa, ustedes saben cómo es la prensa, una palabra y te armó un bardo más grande que una bola de nieve. Hete aquí que los monos salieron al cruce, ¿o habrá sido a tranquilizar? Me parece que la segunda opción es válida, máxime si tenemos en cuenta que lo principal es convencer a sabiendas que detrás del telón, la escena que se vive es otra.

Empecemos por lo que dijo ALL. Dijo que ellos están dispuestos a atender las demandas de sus clientes y potenciales clientes que quieran contratarlos. Yo tengo un cuento mejor: ¡chocolate por la noticia! Luego, otro cuento, más viejo que las promesas de Kirchner, la inversión para mejorar los servicios pero yo tengo una mentira verdadera aún más sincera: no se lo crean, los monos no van a invertir un sope ni partido al medio, cuando hagan bolsa lo que queda de la red, van a levantar campamento. ¿No me creen? No importa, cuando eso suceda en la realidad dentro de... no sé cuanto tiempo, ahí se van a acordar de este montón de hierros cuando dijo esto.

Y sigamos con más cuentos. ¿Quién se atrevería a confesar que al momento que los monos dijeron eso, tuvo la suerte de haber entrado? Quien desee confesármelo, muchas gracias, yo prometo no publicar nombres, para eso yo pongo el mío. Ahora lo que no sabía era que los planes para hacer las cosas eran agresivos... ¿no es que la agresión es signo de violencia? Ay, no, no, ya necesito un diccionario de la Real Academia Española.

Lo que a mí me gustaría saber es ¿a qué ritmo van las reparaciones de los vehículos? ¿Saben algo? Las demandas actuales de exigencias parecen no acompañarlos, casi hasta me animaría a decir cuando mis hermanas de la Unidad, allá abajo, joroban que la cosa anda peluda... bueno, en cámara hiper lenta. Después todos sabemos el otro cuento de la compra de los cacharros que vaya uno a saber de qué basurero salieron... mejor, ni saberlo ¿no? Así no nos enteramos en que malgastan nuestro presupuesto nacional, o la tarra que se llevan en el famoso subsidio.

Pues... ¿Qué llevó a ALL a ser tan generoso que encaró por cuenta propia las obras por la provincia de Corrientes? ¿No querrá sacar tajada en todo esto cuando vengan las presidenciales 2007 y ver de qué forma puede colgarse del Pingüino? Me parece que eso es más creíble, porque todo, absolutamente todo es válido, por tal de seguir currando.

Me olvido. También, me considero afortunada, aclaro, tuve acceso a los acuerdos firmados, y vean las compañías que aún tuvieron la valentía de confiar en los monos cariocas: AGD, Compañía Argentina de Granos, Cargill, Grobocopatel, Nidera, Tosquita, Los Alerces, Leones y Agrenco. Quisiera preguntarles qué cuento les llevaron para lograr su beneplácito (Quiero pensar que no les hicieron un carnaval ni tampoco les ofrecieron llevarlos al sambódromo). Fuera yo, no contrataría los servicios de estos monos. Ni mucho menos haría de apoyo logístico.

Vamos a la vereda de enfrente y los veo a todos juntos los empresarios rugiendo porque el servicio de los monos es una porquería – casi más digo la otra palabra -. Solo puedo decir que nosotros entramos en la última opción ¿tan bajo hemos caído? Pero muchachos, ¿para qué estamos? No nos ven que somos tan lindas y les llevamos todo a todas partes y miren cómo nos tratan. Razón de ser tienen cuando piden que las cosas lleguen a tiempo, y si el viaje de la carga es como viajar a bordo del Gran Capitán, estamos fritos.

Estos muchachos me dijeron “Vicky, ven, vamos a jugar al tiro al blanco”, pensé que era con dardos pero era otro, era específicamente para darle a Agrenco. Yo no entendía un pomo, y entonces me dijeron, esos, Agrenco, los que descubriste que tenían el acuerdo de servicio logístico, es del otro de la frontera. Cazé el mapa y ví que del otro lado de la frontera es... Brasil! No puede ser, todo muere entre brazucas entonces ¿qué cornos somos los argentinos? ¿nos vieron la cara de pelotudos? Por favor! Que nos usen nuestro territorio para hacerle el caldo gordo a los otros monos, habrase visto, aunque ya veo que cualquier día estos monos le ponen precio de venta a la Mesopotamia, total, nosotros somos un puñado de nada.

Le digo a los muchachos que me voy a correr a la oficina de los monos. Digamos que los monos me sacaron carpiendo yuyos y aclarar es imposible, así que las cosas hay que hacerlas de la otra forma si queremos enterarnos de lo que sucede. ¿Qué harán con las quejas argentas los monos? Las deben de usar de papel higiénico, supongo. ¿Y la CNRT? Yo no la he visto, ni la veo, brilla por la ausencia total.

¿Y habrán dicho algo al respecto los monos? El mismo cuento de siempre: estamos atendiendo las demandas de nuestros clientes, pero andamos algo saturados. Pregunta de idiota ¿quién se traga ese cuento?

Al margen de todo esto, quisiera saber ¿sabrá el Héroe Ferroviario de los mocasines con forma de Pingüino todas las atrocidades que suceden acá? Menos mal que fue ni corto ni perezoso que tuvo muy rápido la respuesta a la Tatcher así podemos sentirnos patriotas. Espero que con el Litoral, también sienta algo de patriotismo.